sábado, 29 de noviembre de 2008

El ritual de la serpiente


El ponerse la máscara durante la danza significa apropiarse espiritualmente del animal y anticipar miméticamente su captura. Esta ceremonia no tiene nada de lúdica: para el hombre primitivo, la danza de las máscaras comprende un proceso de crear un lazo espiritual con lo extrapersonal, lo que significa el más amplio sometimiento a una entidad extraña. Cuando, por ejemplo, el indio imita los movimientos y las expresiones del animal, no se introduce al cuerpo de la presa para divertirse, sino para poder apropiarse de un elemento mágico de la naturaleza a través de la metamorfosis personal, algo que no podría obtener sin ampliar y modificar su condición humana. La pantomímica danza de los animales es un acto de culto que expresa con la más alta devoción la pérdida de identidad, al lograr fusionarse con un ente desconocido.
--Aby Warburg, El ritual de la serpiente.


Posdata: Es interesante el contexto del que fue extraido este párrafo. Aby Warburg (1866-1929) fue un gran historiador del arte y uno de los pioneros de la iconología o iconografía, la interpretación de los símbolos y de las imágenes. En 1923 estaba internado en la famosa clínica psiquiátrica de Kreuzlingen, por sus recurrentes "crisis de nervios". Decidió dar una conferencia ilustrada con diapositivas, dirigida a los demás internos y a los médicos, con el propósito de demostrar que ya estaba curado. Describe su encuentro, "veintisiete años atrás", con los indios Pueblo del Oeste norteamericano. Pero el relato de ese universo en vías de extinción adquiere la forma de una meditación formidable acerca del poder de la imagen, de la metáfora y de la ficción. También expresa, de modo más subterráneo, la esperanza que el propio Warburg ponía en la capacidad curativa del pensamiento mítico y simbólico, no sólo para una sociedad enferma, "la sociedad de la electricidad y del teléfono", sino para sí mismo.

foto: Aby Warburg junto a un indio Pueblo, Oraibi, Arizona, 1896.



23 comentarios:

Alejandra Almirón dijo...

Te cuento un ritual de los Nasas y Paeces del Cauca Colombiano: cuando nacen sus niños, entierran la placenta. Con este ritual, garantizan que sus hijos se dediquen a cultivar la tierra. Porque ellos dicen, que cuando se elige trabajar de algo que no esté ligado a a pacha mama, ya no se puede seguir siendo indio.

Fotografías dijo...

Me interesa la lógica de esos rituales, sobre todo desde una perspectiva "borgeana"! En serio! Lee, si no lo leíste, "El arte narrativo y la magia" de JLB.

Eduardo Milewicz dijo...

"Procuro resumir lo anterior. He distinguido dos procesos causales: el natural, que es el resultado incesante de incontrolables e infinitas operaciones; el mágico, donde profetizan los pormenores, lúcido y limitado. En la novela, pienso que la única posible honradez está con el segundo. Quede el primero para la simulación psicológica."

Fotografías dijo...

Esa Milex! Sintonía!

Y si lo pensás, las palabras de Warber también pueden leerse directamente como una descripción de lo que le pasa al actor cuando se mete "en la piel" de un personaje, o no?

Incluso, si no es estirar demasiado las palabras, se puede entender como la descripción de lo que le pasa al espectador cuando se deja "abducir" por una película.

Fotografías dijo...

Warburg...

Anónimo dijo...

Hay algo más profundo que el símil con el espectáculo de cine o la técnica de interpretación. Este genial y “maldito”, Warburg, que sacas de tu mágica baraja, se está refiriendo a una pérdida de la identidad para fusionarse con un ente desconocido, se está arriesgando con dos cojones, como dirán aquí en España, al borde del abismo. Andrés un día tenemos que tomar un chupito de Ayahuasca y seguimos con el tema.

Fotografías dijo...

José, ya sé que Warburg está hablando de otra cosa y la seguimos con el chupito de ayahuasca...

Pero yo no estoy hablando de la "tecnica" de interpetación ni sólo de un símil de lo que sucede en el espctáculo cinematográfico. Creo que, tanto en el caso del actor como en el caso del espectador, puede estar sucediendo algo que se conecta, de una manera profunda y directa, es decir REAL, con la experiencia de la "magia primitiva" según la describe W.

Gabby De Cicco dijo...

Sobre el método: me recuerda a lo que solía hacer Artaud en algunas de sus conferencias, especialmente aquella sobre la peste. Él "representa" la peste no habla de ella. Él se calzaba la máscara de la peste y moría a causa de ella pero a la vez era la peste que acechaba a los pocos espectadores que quedaban.

Fotografías dijo...

Gabby: Artaud! Por supuesto! Nunca leí su "Viaje al país de los tarahumaras", donde narra sus experiencias --reales y/o imaginarias-- en Mexico, entre los indios tarahumaras. Recuerdo haber leído algo sobre aquel viaje en una biografía. Y el recuerdo que tengo es que, después de aquella experiencia, en la que participó en rituales semejantes a los que describe Warburg, dejó de interesarse por el teatro y la poesía. Me voy a fijar un poco.

Fotografías dijo...

A partir de ese momento Artaud no le interesaría ni el teatro ni la poesía, ni siquiera la religión: nada más que la idea de la magia y su propio hechizo. Su experiencia en la sierra Tarahumara ocasionó una ruptura total con el mundo occidental, y Antonin Artaud ya no pudo realizar sus antiguas ocupaciones: parte a Irlanda, de donde lo expulsan por su actitud escandalosa y por consumir drogas. Desde ese momento, su vida se desquicia y su espíritu es prisionero de aquel sueño suyo en el que la cruz de madera de los sacerdotes tarahumaras de Jícuri se confunde con el báculo sagrado de San Patricio. Sin embargo, el mundo moderno rechaza a los soñadores y a los profetas, y el poeta Antonin Artaud muere en el aislamiento, incendiado por dentro tras muchos años de miseria y sufrimientos: del hospital al asilo, encerrado en sí mismo, llevándose con la muerte el secreto de su hechizo y sin ayuda de Yumari, el baile funerario mediante el cual los tarahumaras ayudan al alma para que salga del cuerpo, a fin de que llegue a Rehuegachi, a la cúspide del cielo.
-Jean-Marie Le Clezio, "El sueño mexicano o el pensamiento interrumpido".

Gabby De Cicco dijo...

Gracias por esa cita Andrés. En realidad Artaud sigue haciendo poesía, pero es el desgarro puro no la representación poética del desgarro. Incluso desarma el lenguaje y produce textos con raíces aintíquisimas o bien inventadas. Algunos de sus textos se asemejan mucho o nos pueden hacer recordar a los que cita Bronislaw Malinowsky en su libro "Magia Ciencia y Religion". El viaje de Artaud a Mex. es del 36, es decir que le quedan anos de producción pero claro, su acercamiento a la creación es completamente diferente.

By the way has leido el texto de Artaud: "La cultura India"que prece a su "Aquí yace". Creo q ambos te interesarían mucho, por lo "auto"biográfico pero pasado por el espíritu artaudiano.

Gabby De Cicco dijo...

La cultura india tiene q ver con el viaje a méxico y el aqui yace comienza con una fuerza implacable del yo soy hijo, padre, madre. Muy interesante.

Aclaro lo de "india" para no confundir con la India.

Fotografías dijo...

Epa! Me topé con una artaudista! Asi que mejor guardo la guitarra y mis recuerdos... Mis lecturas de Artaud son de hace MUCHOS años, inspiradas por supuesto por Luis Alberto Spinetta...

Pero buscaré esos textos que me decís. Creo que tengo "Aqui yace", si logro exhumarlo de las pilas de libros de nuestra "biblioteca"...

Gabby De Cicco dijo...

Jaja! no guarde nada! creo q a Artaud le gustarían estos recuerdos y las sonoridades de vuestra guitarra. Y no soy artaudista, apenas amante lectora que cada tanto recae en él. Me hiciste desempolvar ese libro y me enganché frente a la compu a re-leer partes marcadas y así se van tejiendo las re-lecturas, los re-encuentros y los nuevos encuentros.

Intentaré leer el artículo de Borges q mencionaste.

Fotografías dijo...

Gabby, vos estás para "Libro marcado":

http://confesionariosoyyo.blogspot.com/2008/11/invitacin-libro-marcado-iii-mircoles-3.html

Gabby De Cicco dijo...

Uff! lástima que estoy en Rosario!!! Y ya haré una fotografía para postear en mi blog, de los lápices que uso para subrayar :)

Anónimo dijo...

Me apresuré en mi comentario sin detenerme en profundizar lo que querías decir. Y es tal cual, el espectador normalito lleno de normas se transforma de repente en esa oscuridad de la sala de cine colocándose la máscara de los personajes de la película y se produce la magia del cambio de identidad.
En cuanto a Artaud, ¿Te acuerdas de Gus?, Gustavo Olivera, el amigo íntimo de Rama que lleva el teatro del Bolsón, era un “artaudiano” de mucho cuidado, cuanto tuvo su radio declamó el alegato de la cárcel que irritó por la mañana a unos cuantos hippies bolsonianos. Con Gus, comiendo pizzas, hemos hablado entonces de Artaud y los tarahumaras. Ahora bien, “Aquí Yace” y “Viaje al Pais de los Tarahuamras” si no los tienen la biblioteca tendré que pedirlos en la Liberia como pedí el de los cantos de Maldoror. Como sigas así tu blog me va a salir caro.
Abrazos

Fotografías dijo...

Igual, en cuanto a Warburg, tenías razón de que él está hablando de otra cosa. Pero yo me tomo la licencia del lector "interesado" que lleva todo para sus propios intereses y, en ese sentido, es exactamente como decís acá.

Creo que Rama me lo presentó una vez al tal Gus, pero no recuerdo haber hablado demasiado con él. Me imagino lo que habrá sido escuchar las peroratas de Artaud en FM El Bolsón...

Linkillo: cosas mías dijo...

"Somos los sismógrafos de nuestro tiempo", decía Warburg. Me impresionó que estuviéramos leyendo lo mismo. Cuando nos veamos, te regalo mi "Kirchner, una vida", que espero te haga gracia.

Fotografías dijo...

¡Oh, Warburg! ¡Oh, humanidad!

¿Kirchner, una vida? The opera ain't over till the fat lady sings...

Fotografías dijo...

Feliz coincidencia, por otra parte. Si me da el tiempo, haré un post al respecto...

marioingenito51@yahoo.com.ar dijo...

Gabby y Fotografías, estimados sidernautas: ¿Tienen presente la formidable sinfronía y jerogífico de que uno de los integrantes del público de la única conferencia de Warburg sobre el Ritual de la Serpiente haya sido ANTONIN ARTAUD, el que , 60 años antes de Nisargadatta, realizara su misma upaya, insistiendo en que no había nacido y en que eso era tan cierto como un bife con papas fritas?

Anónimo dijo...

hola, me divertí mucho leyendo sus mensajes. Pensando si ahora estarán muertos o tal vez como dice el último comentario fechado 2009, si nunca existieron. Saludos hermanxs fantasmas!