Walkabout fue el último capítulo, hasta nuevo aviso, del cineclub veraniego que habíamos empezado con R en diciembre. El primer largometraje de Nicolas Roeg (1971) cuenta la historia de dos hermanos -una chica adolescente y su hermanito pequeño- que quedan varados en medio del outback, el desierto australiano. Los rescata otro adolescente, un aborigen, que está realizando, precisamente, su walkabout, el periplo por el desierto que deben emprender los adolescentes, como ritual de pasaje, en la cultura aborigen de Australia. La vi por televisión en Inglaterra hace muchos años y me dejó una fuerte impresión. En el recuerdo se confunden los paisajes increíbles, increíblemente fotografiados, y la tragedia racista, tratada sin énfasis pero con potencia. Es una película "lenta", con ciertas licencias poéticas bien de su época, pero me pareció que valía la pena arriesgar. Me facilitó la apuesta el hecho de que uno de los tempranos capítulos de Lost se llamaba, también, Walkabout, lo cual alcanzó para despertar el interés de R.
-No entendí por qué, al final, el chico se pone a bailar.
-¿Y vos qué pensás?
-No sé.
-¿Por qué baila?
-No sé. ¿Porque se quiere divertir?
-OK. En general, ¿las personas bailan solas?
-No. ¿Es para divertirse todos juntos?
-Creo que él quiere bailar con ella. Es más, creo que se quiere casar con ella.
-Y vivir todos juntos en esa casita abandonada.
-Como una especie de familia imposible.
-¿Por qué imposible?
-Porque son diferentes, entre comillas.
-¿Porque él es un "salvaje", entre comillas, y ella "civilizada", entre comillas? ¿"Blanco" y "negro"? Todo entre comillas...
-Un poco más de respeto por tu viejo padre, niño.
-OK, Papá. Entre comillas.
-Andrés Di Tella
4 comentarios:
maravillosa walkabout. ese final, desgarrador...
Yo la vi también por TV hace muchos años, no pude ver los títulos, bueno a veces los cortan, y nunca supe de quien era.
Recuerdo que era lenta, jajja, pero me gustan así.
Nicolas Roeg, Walkabout, 1971. Ya puedo etiquetar el recuerdo, gracias. :)
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Maravillosos esos diálogos entre el joven R y su anciano padre!!
...un placer !
Alejandro: qué bueno poder etiquetar los recuerdos...
Renata: estas conversaciones son, ante todo, un placer para el anciano padre, poder hablar de otra cosa que no sea "por qué no hacés la tarea" etc...
A ver cuándo retomamos.
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