viernes, 21 de octubre de 2011

Carta de Juan Carlos Kreimer


por Juan Carlos Kreimer*

Gracias por haberme convocado al Cosmos y por haber hecho Hachazos, Andrés. Por no haber usado ninguno de los recursos tradicionales del cine para hacer una biopic, por haber seguido el estilo, el tiempo, el ritmo, el hechizo del esquizo que siempre caracterizó a Claudio y sus películas, si es que puede hablarse de dos entes separados sin romper su secreto. Por haber respetado hasta el nivel extremo de acompasarlo con tu manera de hacer cine.

Por la grandeza que le fuiste dando a la sumatoria de elementos mínimos, por los pocos movimientos, por haber entrado en el slow motion del mundo de CC sin caer en la morosidad (primero escribí morbosidad). Por la delicadeza en que tu montaje resignificó cualquier guión, o viceversa, como haya sido, por como vos las llamás: reconstrucciones. Por la circularidad argumental, por lo holográfico, por lo profundo de la desesperación humana que capta cada gesto, por perlas como haber juntado esa cima del viaje a la locura en India y al toque el baile de las margaritas filmadas cuadro por cuadro en el jardín de su casa paterna.

En el 74-75, cuando el grupo de los superochistas era tildado de experimental, otros que también amábamos el paso reducido, y veníamos del escribir, nos referíamos a Claudio (y dos o tres más, Narcisa, Marilouise, Horacio Valleregio ) como cinepoetas. Nuestros surrealistas, los nenes malos del celuloide, los que no filmaban para los demás. Los que no necesitaban mostrar. A la manera de Vicente Zito Lema y Jacobo Fijman, tu película no solo rescata a Claudio —su ser porque no hay más remedio y somos—, su manera de apropiarse de eso que le permiten las cámaritas para hacer sus recortes —su producción, u obra, porque aunque uno lo quiera, lo que va haciendo se le va convirtiendo en karma.

Lo último. A Hachazos le pasa lo mismo que al bañero que va a socorrer a alguien que no puede volver y prefiere quedarse allá, y finalmente no queda claro quién arrastra a quien hacia la costa. Un lujo. Junto mis manos hacia vos. Me saco el enorme sombrero. Y como al final de tu película, me sumo a ese aplauso que no se escapa de la valija de cuero.
Sinceramente
Juanca


Hachazos de Andrés Di Tella
Cine Cosmos UBA
Av Corrientes 2046
jueves, viernes y sábado 20hs


*Juan Carlos Kreimer, autor de Punk, la muerte joven, Contracultura para principiantes y otros libros, fue editor de la legendaria revista Uno mismo y de la serie de cómics "...para principiantes".


2 comentarios:

claudio caldini dijo...

J.C. Kreimer fue uno de los cronistas mas entusiastas del cine underground en la revista Algún Día en 1974. La Semana Super 8 en la Cinemateca Argentina (Teatro Sha, sala 2) fue una proeza que organizó él solito ese año e incluyó una jornada completa de 4 proyecciones simultáneas) de films familiares (inventó el Home Movie Day expandido). También firmó un largometraje en super 8 sobre Samuel Beckett, nada menos, donde fuí camarógrafo hasta que me reemplazó Horacio Vallereggio. La foto que le envié desde Barcelona, en el Park Guell, podría aparecer en Hachazos... Saludos J.C...
un abrazo

claudio caldini dijo...

Yo también recibí una carta, Andrés, de la que solo transcribiré un fragmento: leí la nota de .... en Radar. me gusta. como con todas de las decenas de notas respecto a Hachazos, me parece de una lucidez espeluznante lo que decís. sin embargo, no puedo entender cómo se siguen repitiendo tantos errores y mentiras pautadas en el libro/film de ADT... (que seguís viviendo allá... que hiciste LUX TAAL con una cámara prestada, etc. etc.). no lo comprendo, me parece atroz.


en fin... de eso debe tratarse el periodismo.

saludos