viernes, 20 de noviembre de 2009

Diario de Londres 2

En la Tate Modern nos encontramos con nuestra amiga Lily, que vive en Nueva York hace veinte años y que vino a Londres especialmente para ver la presentación de Cecilia. Coincidimos con Ceci que tiene algo de "mi amiga" Isabelle Huppert (ver Diario de Lima). Eso que acá, en la foto tomada en el instante del encuentro, está recién llegada del aeropuerto, sin dormir.

Al entrar al imponente Turbine Hall fue imposible evitar la obra de Miroslav Balka, How It Is. Se accede por una rampa a un gigantesco container industrial, en una penumbra inquietante que se transforma, al ingresar, en una virtual oscuridad total, donde apenas se percibe la presencia de los otros visitantes. Miedo primitivo a la oscuridad o reminiscencias del terror... De hecho, nuestra amiga Lily, neoyorquina aguerrida que es, se cagó en las patas y no se animó a entrar.

Después de How It Is, toda la exposición Pop Life: Art in A Material World -una puesta extraodinaria, como casi siempre en la Tate- inspira terror. El lema de la muestra es una frase de Warhol (y van): "Good business is the best art". Y los curadores se atrevieron a mostrar el "peor" Warhol, del que la crítica hoy habla muy poco. Warhol el trepador, el que hacía retratos del que sea, al mejor postor (asi es como Amalita Fortabat se hizo de su propio Warhol, por ejemplo). La curaduría define la revista Interview como su "in-house social climbing vehicle". Igual, no deja de ser el mismo Warhol de siempre, el mismo inventor de siempre, precursor de tantas cosas. Para bien o para mal.

También presente en la Tate, la última encarnación de los animal spirits de Warhol: Damian Hirst. Hirst dió una vuelta de tuerca al mercado del arte al rematar él mismo 223 obras nuevas, en septiembre del año pasado, en increíble coincidencia con el colapso de Lehman Brothers. En la Tate presenta una obra que llamó mucho la atención: en la pared, dos obras gemelas, con la presencia de varias parejas de gemelos idénticos, sentadas delante. Le pregunté a una de las chicas: Are you part of the work? Me sonrieron las dos y, al mismo tiempo, dijeron Yes. Y se rieron de la coincidencia. Muy inglesitas, sin embargo parecían japonesas.

Takashi Murakami, el Warhol japonés. Infaltable.

La pieza que más me impresionó, sin embargo, fue la de Andrea Fraser, una joven artista inglesa cuyo trabajo desconocía. Fraser le pidió a su galerista que ubicara un coleccionista dispuesto a comprar un video donde el mismo coleccionista quedaría registrado teniendo sexo con la artista, en la habitación de un motel. El resultado es un tape de casi una hora de duración en el que vemos exactamente eso, de principio a fin. No me quedé delante del monitor una hora entera para comprobarlo, pero antes de irme volví a pasar a ver en qué estaban. Y sí (ver foto). Lily lo odió, pero a mí me pareció muy fuerte. "Todo mi trabajo habla de lo que queremos del arte: lo que quieren los coleccionistas, lo que quieren los artistas de los coleccionistas, lo que quiere el público de los museos... no sólo económicamente, sino también en términos más personales, psicológicos y emocionales". Lo que se dice encarnar una idea.


8 comentarios:

Tommy Barban dijo...

Mi mujer es coleccionista; me preocupo?

julieta eme dijo...

quiero ver ese video!! jaja

melisa brito aller dijo...

La obra de Miroslav Balka me hizo acordar lo que sentí al entrar a la sala-torre oscura de Daniel Libeskind en el Jüdisches Museum Berlin... igual creo que la sala diseñada por Libeskind remite a las reminiscencias de un terror en particular. Y respecto al video de Andrea Fraser, si, parece ser muy fuerte... igual me genera curiosidad de verlo, jajaja

Anónimo dijo...

no tommy, no estamos en londres.
era hora de las fotos!

cecisz dijo...

mellizo: ahora me preocupás a mí! acaso estamos excluídos del artes radical en esta región del planeta? sniffff!

Renata Cardarelli dijo...

Ojis esta Andrea me parece piolisima ..cuidado con ella ...hay que seguirla...olfato descomunal y una climber coleccionistas de aquellas .... extreme precauciones Ud. !! muy prudente no pasarse la hora frente a ese video Andrès...vaya a saber que sale de allì en un punto ..

girlontape dijo...

fuerte la fraser, sí. y autosadica! y gracias por el recorrido... hace years & years que no piso el tate, lo echaba de menos.

Anónimo dijo...

Sebastian Elsinger dijo...
Parece que Andrea Fraser le cobro u$s 20.000 al coleccionista. Desmedidamente muy por encima de lo que recibe la mayoría de las mujeres a cambio de hacer lo mismo, salvo Heidi Fleiss, tal vez o profesionales de ese nivel de Hollywood. Habría que ver si el coleccionista no pagó eso también para ser parte de la obra y terminar expuesto en la Tate, a lo Big Brother, no se.